El mes de noviembre es de especial importancia para la música en España. Esta afirmación está avalada en primer orden por la modalidad de guitarra más conocida mundialmente, cuyo apellido –“española”– habla por sí mismo.
Posiblemente no haya otro instrumento musical que a través de toda su evolución haya acompañado en tantas ocasiones al ser humano. La guitarra por sus características físico-acústicas no solo ha estado presente en los más diversos escenarios históricos, sino que ha tenido un papel social decisivo en determinados espacios geográficos. Desde el folklore, hasta la música popular urbana –con especial énfasis en la canción de autor– la guitarra española ha mantenido por mucho tiempo su indiscutible presencia.
El desarrollo técnico y el protagonismo que ha alcanzado este instrumento desde finales del siglo XIX hasta nuestros días tiene su origen en el arduo trabajo del compositor y guitarrista español Francisco Tárrega (Villarreal, Castellón, 21 de noviembre de 1852 – Barcelona, 15 de diciembre de 1909). Su obra Recuerdos de la Alhambra –de ejecución nada fácil– es un referente obligado en la mayoría de los estudiantes y profesionales de la guitarra clásica a nivel mundial. Tárrega no solo sentó las bases de los fundamentos técnicos de la guitarrística moderna, sino que impulsó y estimuló la presencia de este instrumento en los más importantes escenarios. Además de eso, al igual que hicieran sus coterráneos Pablo Sarasate e Isaac Albéniz, introdujo en sus composiciones elementos de la música popular española.
Por otra parte, la guitarra española, después de haber estado ausente en el catálogo de los más importantes compositores del siglo XIX europeo, ha tenido un revival como instrumento concertante a partir de la pasada centuria. Eso es un hecho innegable. Compositores y obras de amplio reconocimiento –así como de grandes éxitos– dan fe de ello. Unos de los ejemplos que no pueden faltar cuando de la guitarra clásica se trata es, sin lugar a dudas, el Concierto de Aranjuez del compositor español Joaquín Rodrigo (Sagunto, Valencia, 22 de noviembre de 1901 – Madrid, 6 de julio de 1999). Esta obra, de la cual puede decirse con toda seguridad que es de las más importantes de las que se hayan escrito para la guitarra española, es también una de las más conocidas y aclamadas por el público internacional. El Concierto de Aranjuez está desde hace mucho instalado en la memoria colectiva, como un elemento indispensable de lo que hoy se conoce como “marca España”.
Teniendo en cuenta a ambas personalidades de la música en la Península Ibérica, no podemos pasar por alto otra importante figura, también asociada a la guitarra española y al mes de noviembre: Narciso Yepes (Lorca, 14 de noviembre de 1927 – Murcia, 3 de mayo de 1997). Y es que en este excelente guitarrista español podemos, de cierta forma, aunar los resultados del camino emprendido por Tárrega –como impulsor y desarrollador de la guitarra– junto a la creatividad de Rodrigo. Su magistral, profunda y sensitiva interpretación del Concierto de Aranjuez considerada una de las más brillantes que se hayan hecho hasta el presente es, más que una prueba, una certeza.
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Las piezas musicales que componen la playlist de GUITARRA ESPAÑOLA, es un perenne homenaje, no solo a este legendario instrumento sino a un componente vital e identitario de la hispanidad.
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Canal destinado a la música para guitarra compuesta en su totalidad por autores españoles nacidos a finales del s. XVIII en adelante. Es un canal para todo tipo de audiencias por la cercanía cultural que transmite. Los intérpretes han sido cuidadosamente elegidos desde los más reconocidos internacionalmente, hasta los actualmente más activos y aún no reconocidos, pero de gran calidad.
