•  | 
  • 3 min

Publicidad: la diferencia entre prospecting y retargeting

La publicidad juega un papel muy importante en todos los negocios. No solo atrae a más clientes, sino que también ayuda al posicionamiento de marca y a dar a conocer los beneficios del producto o servicio que se ofrezca al consumidor, entre otras muchas cosas. No sirve de nada tener el mejor producto si no se da a conocer, pues si nadie lo sabe que existe no habrá ventas y la posibilidad de que un usuario acabe en una página web y compre es prácticamente inexistente. 

Lo más común es que, una vez este acceda a la landing por primera vez no se convierta. Abandonará la página web sin realizar ningún tipo de acción. Para afrontar esta situación, las marcas utilizan estrategias de captación como prospecting y retargeting pero, ¿en qué se diferencian?

¿Qué es el prospecting?

El prospecting es la estrategia de captación que se utiliza para buscar y detectar potenciales clientes. Para llegar al público objetivo. En el ámbito de la publicidad el prospecting se utiliza en la difusión de anuncios en sites donde se localicen. Por ejemplo, mediante la colocación de anuncios en páginas web de terceros que cumplan con las características requeridas.

A la hora de escoger una web donde poner publicidad, esta tiene que cumplir diferentes requisitos y recoger al mismo público al que queremos llegar. Para ello, es crucial tener definido al máximo detalle quiénes son los buyer persona de la marca. Las técnicas más utilizadas en este aspecto son las siguientes:

  • Publicidad Contextual: Es la que permite colocar anuncios en webs o blogs que tratan de temas relacionados con el producto o servicio del que se quiere hacer publicidad.
  • Second and third Party Data: Son los modos de acceder a datos que permiten trazar estrategias de marketing. El objetivo es saber cuáles te benefician más acorde con la situación actual de una empresa y los KPI’s que se hayan trazado previamente.
  • Lookalike Audience: Se trata de herramientas que permiten a la marca encontrar nuevos públicos relacionados con un target. Estos, por lo tanto, tendrán mayor potencial de conversión. 

¿Qué es el retargeting?

El retargeting o remarketing funciona gracias a las cookies que se instalan en el navegador de un usuario cuando visita una web. A medida que estas personas vayan entrando en otros sites que acepten anuncios de campañas de terceros, se les irá mostrando publicidad de productos que hayan visto anteriormente. Con esto aumenta el CTR y la conversión, además de recuperar a aquellos usuarios que dudaban a la hora de realizar una conversión o compra.

Es decir, el retargeting es una técnica cuyo objetivo es impactar a los usuarios que previamente han interactuado con una determinada marca. Se trata de recordar a los usuarios interesados en un producto que está ahí y existe una opción muy interesante de compra. 

Aunque el ejemplo más común de remarketing son los usuarios que han visitado nuestra página web no es la única posibilidad. Estos impactos suelen producirse en canales como:

  • Publicidad de display: Una vez el usuario visita determinadas webs le aparecerán banners de una marca con mensajes personalizados y adaptados según sus búsquedas e intereses.
  • Email marketing: Un ejemplo sería el envío de emails personalizados a aquellos usuarios que dejen una compra a medias.
  • Anuncios en redes sociales: Con Facebook Ads, entre otras interfaces de publicidad en redes sociales, es posible personalizar también la información que ya tenemos sobre los usuarios y segmentar mejor los anuncios.

A pesar de contar con más herramientas de publicidad y poder llegar a públicos diferentes, cada vez resulta más difícil conseguir tráfico cualificado. Por eso, en el Postgrado en Publicidad Programática & Native Advertising de IEBS podrás especializarte en la compra de tráfico online y en la captación de leads.