La crisis en los sectores agropecuario y de transportes están sacudiendo con fuerza a los numerosos autónomos y trabajadores que se dedican a esas actividades. El resto de sectores también ve como las dificultades sufridas especialmente por el transporte perjudica su actividad económica. ¿Puede ayudarse a los autónomos con medidas fiscales? Los Técnicos del Ministerio de Hacienda, Gestha, proponen una serie de medidas para aliviar a estos sectores.
Corren malos tiempos para los autónomos, especialmente del sector del transporte. A finales de año, el desabastecimiento y la inflación asomaban como las principales amenazas a la economía. Desafortunadamente, los vaticinios se hicieron realidad de la forma más descarnada. La crisis de suministros se hizo realidad, pero sobre todo, la inflación repuntó a niveles no vistos desde los años 80. Además, la guerra de Ucrania vino a agravar la situación económica.
El Gobierno planteó la posibilidad de rebajar el IVA de carburantes y gasóleo para el transporte. Sin embargo, es una medida que requiere una modificación de la legislación europea. La última propuesta del Ejecutivo gira en torno a subvenciones a la gasolina como alternativa a la rebaja fiscal.
Los Técnicos del Ministerio de Hacienda, Gestha, han planteado al Gobierno una batería de medidas para mitigar la crisis de los sectores agropecuario y de transportes, empeorada por las consecuencias de la guerra en Ucrania.
Medidas fiscales para los sectores agrario y ganadero
Pese a la intención inicial de Pedro Sánchez de rebajar la factura fiscal, salvo que se modifique la Directiva europea y Ley de Impuestos Especiales o del IVA, los Técnicos de Hacienda señalan que hay poco o ningún margen para bajar los impuestos a los carburantes, más allá de aumentar la devolución del gasóleo bonificado empleado en la agricultura y ganadería. Esta mayor devolución debería ser transitoria, mientras dure la escalada de precios, pues no hay que olvidar el compromiso de igualar el Impuesto con el de las gasolinas, y los técnicos tampoco ven viable bajar el IVA teniendo en cuenta su enorme coste asociado.
Incentivos fiscales en Sociedades e IRPF
Por ello, Gestha propone atacar la raíz de la dependencia energética española, por lo que piden que se aprueben incentivos fiscales en el Impuesto sobre Sociedades y en el IRPF a la producción y uso de energías sustitutivas del gas y combustibles derivados del petróleo. En particular, sugiere ampliar hasta el 31/12/2023 la Deducción por obras de mejora de la eficiencia energética de viviendas en el IRPF.
Ayudas directas a los sectores afectados
Además, los técnicos defienden la aprobación de ayudas directas a los sectores agropecuarios más afectados por el aumento de costes y demás consecuencias de la guerra en Ucrania. A juicio de Gestha, estas ayudas tendrían que estar vinculadas directamente a compensar gastos extraordinarios e inversiones destinadas exclusivamente a facilitar las compras de materias primas y las ventas en otros países.
Buscar mercados alternativos a Rusia y Ucrania
En este sentido, los técnicos apremian a España para adelantarse a terceros países en el aseguramiento, al menos a medio plazo, en los mercados alternativos donde adquirir los cerca de 970 millones de euros y vender los más de 440 millones en productos del sector primario que conforman las relaciones comerciales bilaterales con Rusia y Ucrania.
Medidas fiscales para el sector del transporte
Por otra parte, y atendiendo a las reivindicaciones de los transportistas en este contexto tan extraordinario, los técnicos también proponen valorar una bajada -transitoriamente mientras dure la escalada de precios- de los impuestos que pagan, dado que la devolución del gasóleo de automoción de uso profesional deja la imposición en el límite mínimo permitido por Europa.
Según el secretario general de Gestha, José María Mollinedo, “no se puede bajar el IVA al gasóleo, ni a las gasolinas porque estamos “armonizados” con la Unión Europea que nos exige aplicar el tipo general del IVA en los carburantes, e incluso nos demanda que aumentemos la tributación de gasolinas y gasóleos a la media europea. Además, estas medidas que no atacan el problema serán compensadas con el aumento de precios, como ha ocurrido con la bajada de impuestos a la electricidad”.
