Si una semana tiene 168 horas, el 44% del tiempo (74 horas), las pasamos conectados a Internet, aunque no siempre del mismo modo, pues el dónde y el cuándo dibujan al consumidor digital. Por citar un ejemplo, entre las seis de la tarde y las diez de la noche es cuando más gente “sale” digitalmente a comprar. Uno de cada cuatro españoles está en la red a esas horas tirando de tarjeta o informándose para futuras compras, pero en cambio sólo un 16% lo hace por la mañana.
Es el nuevo prime time del consumo, según el informe Nielsen Digital Consumer 360, que en su primera edición analiza junto a RN SSI un día cualquiera en la vida del consumidor digital.
El único denominador común al consumidor online es el dispositivo pues nueve de cada diez se conectan a diario con el móvil y un 74%, con el portátil. Son nuestros enlaces con el mundo virtual en donde pasamos más tiempo que en el mundo de los sueños, más de diez horas de media frente a las siete de dormir. En total, tres cuartas partes de la semana estamos haciendo clic o estamos “off”.
Si analizamos dónde nos conectamos, nuestro espacio esencial es el hogar, especialmente entre semana, tal como hacen nueve de cada diez españoles de lunes a viernes. En fin de semana, al aumentar los momentos de ocio y pasar menos tiempo en el domicilio, son algunos menos los que hacen coincidir el espacio doméstico con el virtual, un 74% en total.
Más allá de nuestras particulares cuatro paredes, hay tres grandes momentos en nuestro día a día, el transporte, el trabajo y el ocio. Por un lado, tres de cada diez españoles se meten en la red de camino a su lugar de trabajo o al centro de estudios, aprovechando en muchos casos el uso del transporte público, que permite que los tiempos muertos cobren vida.
Una vez que fichamos y, hasta que acaba la jornada laboral, casi la mitad de los españoles se conectan en algún momento en el trabajo. En concreto, un 46% abre una ventana de más en el ordenador o no puede resistirse a coger por unos instantes el móvil.
Los momentos de ocio en cambio son menos afines a Internet y es cuando desconectamos más. A pesar de ello, más de un 30% de españoles no puede “vivir” sin estar conectado en lugares públicos como el parque o la playa o cuando sale a tomar o comer algo. Y un 25%, cuando va de compras.
Arreglarse, vestirse…y conectarse
Lo primero que hacemos los españoles nada más despertarnos es coger el móvil, aunque sólo sea para apagar el despertador. La mitad de los españoles ya está “on” con las primeras luces de la mañana.
Así, algo más de un 30% consulta sus perfiles en redes sociales y casi un 22% lee la prensa online, frente a sólo un 7,9% que lee la prensa impresa, por lo que preferimos informarnos de nuestro entorno que del mundo. Eso sí, el arranque de la jornada también tiene su punto analógico, pues un 41% escucha la radio.
A partir de las nueve de la mañana, la conexión es masiva pues un 80% está on a estas horas. Pero casi la mitad aprovecha ratos o encuentra momentos para echar un vistazo a sus perfiles sociales, mientras que un 35% lee la prensa online.
El efecto doble pantalla y el shopping
A medida que transcurre la tarde empieza a aparecer el esparcimiento y es en esa franja diaria cuando emergen dos particularidades: el efecto doble pantalla que es determinante para que los anunciantes puedan cerciorarse de que los usuarios prestan atención y retienen los mensajes, e Internet como canal de compra.
Por un lado, ocho de cada diez españoles están en la red, pero en las primeras horas de la tarde alrededor de la mitad ve la tele convencional. Sólo a partir de las diez de la noche es cuando se reduce el número de usuarios online y aumenta el de telespectadores, un 69,8% (diez puntos menos) está en Internet y un 55% viendo la tele.
Y por otro lado, el shopping online empieza a hacer acto de aparición. Según vaya avanzando el reloj, las tiendas virtuales se van llenando. Entre las tres y las seis de la tarde, un 19,4% usa Internet como canal de compra, pero entre las seis y las diez el porcentaje aumenta hasta el 25,8%. Ya con la noche cerrada, “apenas” un 13% está de tiendas.
Según la responsable de Medición Online de Nielsen España, Maira Barcellos:
Si las marcas no entienden al consumidor digital, están perdiéndose 74 horas a la semana de su vida, 10 horas de su día. Mucho tiempo de exposición que hay que conocer y entender para atinar y hacer eficientes sus campañas publicitarias. No entender su vida digital es no entender su vida. Son muchos euros que se pierden y el riesgo es incremental a medida que aumentan los dispositivos y los canales. De ahí la importancia de esta fotografía del consumidor digital, de saber cómo, cuándo, dónde y para qué se conecta.