Seis meses después del inicio de la pandemia de Covid-19 y el primer confinamiento, la situación de los autónomos, lejos de mejorar, está preñada de pesimismo e incertidumbre. El 80,8% de los autónomos afirma que su facturación ha caído respecto a la del año anterior, mientras que la mitad de ellos, unos 1,6 millones de autónomos, han visto como sus ingresos se desplomaban por encima del 60%.
Tan sólo el 3,1% de los trabajadores autónomos han visto crecer su facturación, mientras que el 13,5% afirma que sus ingresos se mantienen en niveles similares respecto al año pasado. Estos son algunos de los datos que revela la 6ª Oleada del Barómetro ATA y que refleja la situación recogida mediante encuestas realizadas entre el 18 y el 20 de septiembre.
«Estamos en una situación de emergencia»
La situación es delicada para esta gran mayoría de autónomos que han reducido bruscamente su facturación. En plena segunda oleada de coronavirus, el problema es mucho más acuciante para el 8,3% de autónomos que no están ingresando nada.
Estamos en una situación de emergencia. Y vamos tarde. Es necesario implementar medidas ya que salven actividades de autónomos, sus empresas y los empleos que generan”, ha asegurado Lorenzo Amor, presidente de ATA. “Volvemos a estar en una situación extraordinaria que necesita de medidas extraordinarias”, ha remarcado el presidente de ATA.
370.000 autónomos tienen sus negocios cerrados
La virulencia de alguno de los rebrotes hace difícil que se pueda volver a la situación anterior a la pandemia. De hecho, un 12,5% de los autónomos, 370.000 personas, tienen sus negocios cerrados en la actualidad, de los cuales, el 7,7% lleva sin actividad desde marzo.
Un 57,6% afirma que, aunque ha abierto, está funcionando a la mitad de su rendimiento habitual. Sólo el 15,6% declara estar abierto al ritmo normal.
Uno de cada tres autónomos, perjudicado por la morosidad
Otro azote de los autónomos en estos tiempos de fuerte incertidumbre es la morosidad. El 33% de los autónomos la sufren, según los resultados del Barómetro, de los que el 16,9% hablan de morosidad por parte de empresas privadas únicamente. El 5% sufre sólo la morosidad pública, mientras que el 11,3% padece ambas.
El “fracaso” de la prestación por cese de actividad
Prácticamente uno de cada dos trabajadores autónomos, el 48,7%, se benefició de la prestación por cese de actividad extraordinaria y en los meses de julio, agosto y septiembre se les exoneró de la cuota total o parcialmente. El 51% no pudo acceder a estas exoneraciones porque no accedieron durante el estado de alarma a la prestación extraordinaria.
Según ATA, sólo un 7,1% de los autónomos la ha solicitado y de este porcentaje se le ha concedido al 72,2%. De ese 23,5% de autónomos que pidió la prestación por cese de actividad ordinaria pero ésta le fue denegada, el principal motivo de dicha denegación fue por no poder acreditar el periodo mínimo de cotización (el 32,9%). Por estar en pluriactividad se le ha denegado al 11,4% y por haber estado de baja, por ejemplo, por paternidad o maternidad, con la que no es compatible, al 2,9%.
ATA considera un “fracaso” la gestión de esta prestación, sobre todo porque tres de cuatro autónomos considera imprescindible el cobre de cualquier tipo de prestación para salir adelante.
Crece el porcentaje de autónomos que no soportarían otro confinamiento
Las cosas no han dejado de empeorar desde el inicio del verano. Si en julio, era un 70,3% el porcentaje de autónomos que no podría sobrevivir a un segundo confinamiento, en el actual Barómetro de ATA, el porcentaje sube al 72,4%.
Así, otro confinamiento supondría el cierre definitivo de su negocio (17,83%), que es posible que significara el cierre definitivo (35,66%) o que al menos tendría que reducir el tamaño de su empresa para poder continuar (18,92%).
Sólo el 15,9% de los autónomos señala que en este caso podrían seguir con su actividad: el 7,15% señala que podría seguir sin problemas y el 8,75% señala que no le afectaría porque su actividad se considera esencial.