¿Sabías que el término App fue seleccionado en 2010 Word of the Year (Palabra del Año) por la American Dialect Society? Y tú, ¿qué sabes sobre Apps?
¿Qué son las Apps?
Son programas informáticos diseñados para teléfonos inteligentes, tabletas y otros dispositivos móviles.
¿Para qué sirven?
Las app sirven para hacer cosas. ¿Qué tipo de cosas? Todas las cosas.
Ya no hay ninguna actividad habitual o gestión que no tenga su app “facilitadora”. Noticias, juegos, comunicación, redes sociales, salir de fiesta, ligar, vender… Mi hija sigue buscando en la app store la de “que el perro me entienda lo que le digo”. Aún no está, pero llegará pronto.
¿Quién las hace?
Cualquiera que tenga una idea y sepa cómo hacerlo.
¿De dónde puedo descargarlas?
En general puedes encontrarlas en las “tiendas” de las compañías propietarias de los sistemas operativos móviles. Las principales son itunes para los productos de Apple, Google Play para dispositivos Android y la tienda de Windows Phone para que usan este sistema operativo.
Los teléfonos y tablets suelen incluir una opción que da acceso directo a ellas. Si no, puedes visitarlas escribiendo su dirección URL en el navegador del dispositivo. En algunas tiendas es necesario registrarse antes de la primera descarga. En todas ellas encontrarás las aplicaciones agrupadas por categorías y buscadores con los que localizar aplicaciones concretas.
Hay Apps gratuitas y de pago
¿Cómo se pagan?
Algunas son gratuitas y otras de pago. Tú pagas a la tienda y ellos reparten según lo acordado en cada caso con el diseñador.
¿Por qué hay algunas aplicaciones gratis?
Por varios motivos:
- Porque ganan dinero con la publicidad que insertan en la aplicación, por lo que les interesa que haya un número alto de usuarios.
- Porque ofrecen una versión básica gratis para que el usuario la pruebe con la esperanza de que compre una versión con más capacidades (y de pago) en algún momento. O incluso ofrecen “extras” que se pueden comprar adicionalmente para enriquecer la aplicación.
- Porque es una pieza más de su estrategia de marketing, que les facilita la interacción con el cliente y les permite acercarles a otros productos de la compañía.
¿A qué tipo de datos pueden acceder las aplicaciones?
No es infrecuente que una aplicación pida autorización para acceder a la información almacenada en su dispositivo. Puede ser a la lista de contactos, el registro de llamadas, a los datos transmitidos por internet, a la información de su calendario o a su localización.
En general sólo deberían acceder a los datos necesarios para su funcionamiento. Pero cuidado porque no siempre es así. La recomendación es aceptar el acceso sólo cuando tengamos claro que tiene sentido. Por ejemplo, parece que lo tiene permitir el acceso a nuestra posición en aplicaciones que muestran qué restaurantes hay en los alrededores. Si decide no permitirlo, lo único que pasará es que no podrá disfrutar al máximo de las capacidades de esta aplicación.
¿Cómo puedo saber a qué tipo de información se puede acceder desde una aplicación?
No siempre es fácil saber a qué datos se podrá acceder a través de una aplicación, ni cómo se usarán esos datos.
Lo que no falla nunca es el sentido común. Antes de descargar una aplicación, valora la utilidad y fiabilidad de lo que va a descargar. Las tiendas de aplicaciones suelen incluir información sobre la compañía que desarrolló la aplicación. Desconfíe de las aplicaciones “sin padre reconocido”.
En dispositivos con sistema operativo Android, se pueden leer “autorizaciones” justo antes de la instalación. Léalas.
Las Apps son más ágiles que las webs
¿Por qué algunas aplicaciones recolectan datos de localización?
Hay algunas aplicaciones que usan datos específicos de localización para ofrecerle mapas, cupones para tiendas cercanas, o información sobre servicios que se encuentran en las inmediaciones.
Nuevamente, sentido común. Acepte sólo cuando le aporte valor el hacerlo. Y recuerde que una vez que dé su autorización, se podrá continuar accediendo a su ubicación hasta que usted cambie configuración de su teléfono.
¿Qué diferencia hay entre una App y una Web móvil?
La principal es que las aplicaciones tienen que ser descargadas e instaladas antes de usar, mientras que a una web puede accederse simplemente usando un navegador. Amén de matizar que no todas las webs están adaptadas para ser vistas correctamente desde el móvil, las Apps son más ágiles por lo que suelen ofrecer una mejor experiencia de uso.
A su favor, las Apps pueden utilizarse aun cuando se está sin conexión a Internet. Y cómo hemos visto, tienen la capacidad de aportar funcionalidad “extra” en base a acceder a datos y capacidades del propio teléfono.
Y si tengo un negocio y ya tengo Web, ¿me planteo hacer una App?
No hay que elegir. Webs y Apps no son competidoras, sino complementarias. Por ejemplo tendría sentido disponer de una App para facilitar al cliente las interacciones más frecuentes y utilizar la web como canal de información y para motivar la descarga de la aplicación.
Si ya tiene una Web, recomiendo valorar qué funciones y contenidos serían adaptables. Cuando el diseño es desde cero, sin Web ni App, recomiendo focalizarse en el móvil y no sólo por el brutal incremento de la penetración de Smartphones y Tablets, sino la tremenda efectividad del marketing móvil.
Yo cada vez soy más fan de las Apps, más ajustadas a los nuevos hábitos de consumo. 7 de cada 10 personas no salen de casa sin móvil y aprovechan cualquier minuto para buscar información, comparar y hacer gestiones. Incluso para comprar, porque cada vez queremos más ir a “tiro hecho” y ya no vemos tanta diferencia entre la web y la tienda física.
Y tú, ¿ya sabes qué va a ofrecer tu App?