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¿Cómo superar tu miedo al fracaso si acabas de emprender?

Muchos aspirantes a empresarios dejan que su miedo al fracaso les impida iniciar un negocio. Tal vez sea debido a todas las estadísticas que hemos escuchado (ya sabes, las que nos dicen que el 90% de todas las nuevas empresas fracasan a los 3 años).

Existen muchas razones por las cuales un negocio falla (y para que lo sepas, no es el fin cuando esto sucede). Sin embargo, el miedo al fracaso por sí solo nunca debería ser suficiente para que no se inicie un negocio.

Es perfectamente natural tener sentimientos de incertidumbre sobre en qué te estás metiendo a medida que te conviertes en un emprendedor. El truco es no dejar que esos sentimientos te paralicen y te impidan tomar decisiones.

La única forma de superar realmente un miedo es enfrentarlo, y debes decidir tomar medidas a pesar de él. Sí, ese miedo volverá a aparecer de vez en cuando, pero la buena noticia es que puedes aprender a ignorarlo y mantenerte concentrado en construir tu sueño.

Aquí te dejo algunas estrategias para ayudarte a superar el miedo al fracaso:

Redefine lo que significa fallar

Una de las principales razones por las cuales muchos aspirantes a empresarios permiten que el miedo al fracaso los detenga de comenzar su negocio, es porque ven el fracaso como algo negativo.

Curiosamente, si estudias las biografías de empresarios exitosos, descubrirás que en la mayoría de los casos sus carreras estuvieron plagadas de “fracasos” antes de que triunfaran.

El fracaso no es lo opuesto al éxito, es parte del éxito. Un fracaso no es más que un resultado que obtienes y que no deseas. No es ni bueno ni malo, es solo retroalimentación.

Al aprender de esto y seguir tomando medidas y decisiones que produzcan más retroalimentación, aprenderás, eventualmente, las lecciones que necesitas para alcanzar el éxito.

Deja de compararte con los demás

Cada industria tiene un grupo selecto de personas y empresas que se elevan a la cima. Una de las maneras más efectivas de tener éxito rápidamente es aprender de sus enfoques y emularlos.

De hecho, es aconsejable estudiar los éxitos (y los fracasos) de los empresarios en general, independientemente de la industria o negocio donde se encuentren. Solo ten cuidado de no compararte con ellos.

Con el fin de construir un negocio único, debes aferrarte a tu singularidad como individuo. No es prudente compararte con los demás por la sencilla razón de que tú no eres ellos, y de que no deberías ser como ellos.

Admira el éxito de los demás, pero no los envidies. Respeta los resultados que otros empresarios puedan obtener, pero concentra la atención en los resultados que tú deseas crear.

Sigue adelante

Otra forma efectiva de superar tu miedo al fracaso es tomar medidas a pesar del miedo. Cuando las dudas, los miedos o cualquier otro pensamiento negativo entren en tu mente solo mantente enfocado en tomar acción.

El miedo es una sensación común cuando haces cosas que nunca has hecho antes, pues cuando haces algo nuevo, sales de tu zona de confort e ingresas a lo desconocido.

Sin embargo, en lugar de refugiarte en tu zona de confort cuando sientas miedo, abrázala y elógiate a ti mismo por tener el coraje de entrar en una experiencia nueva y desconocida.

Al enfrentar tu miedo y continuar actuando, tu zona de confort se expande, y finalmente, esa nueva experiencia se convierte en una experiencia familiar, y por lo tanto, el miedo disminuye.

Los empresarios exitosos han aprendido a utilizar el miedo como un motivador para seguir avanzando.

Ya sea el miedo al fracaso, el miedo al rechazo, el miedo a la mediocridad o el miedo a la pobreza, utilizan deliberadamente ese miedo para alimentar su motivación y triunfar.

No te enfoques en los problemas, busca soluciones

Nunca olvides que existen empresas para proporcionar productos o servicios que resuelven problemas específicos en el mercado.

Para tener éxito como emprendedor, debes aprender a aceptar los problemas, pero no enfocarte en ellos.

Aprende a percibir cada problema como una oportunidad para crear una solución y para cubrir una necesidad no satisfecha.

Si tus empleados se quejan de desafíos específicos, puede haber una oportunidad ahí. Si tus proveedores se quejan de algo, también puede haber una oportunidad ahí.

Cuantos más problemas puedan resolver tú y tu empresa, más te verás recompensado (financieramente y de otros modos) por ser capaz de proporcionar soluciones.

Y tú, ¿cómo superas tus miedos?