¿Buscas la creatividad en tu negocio? Hasta hace poco una cualidad infravalorada, en la actualidad la creatividad es una habilidad cada vez más demandada. ¿Cómo podemos fomentar y cultivar la creatividad?
La creatividad y la innovación son cada vez más valiosas a medida que el entorno empresarial se vuelve más competitivo. La creatividad sirve para diferenciarse de la competencia y coger ventaja sobre ésta. El trabajo creativo nos saca de la zona de confort y favorece el desarrollo de nuestro negocio.
Por qué es importante la creatividad
La creatividad abre paso a la innovación, la cual permite crear o mejorar un producto o servicio y colocarlo de la mejor forma posible en un mercado. Pero la creatividad no se limita a ayudarnos a crear nuevos productos, sino también a mejorar e innovar en nuestros procesos empresariales.
La creatividad es una cualidad que brilla más durante la infancia y que se va agostando con el paso del tiempo. Por eso es menester cultivarla y trabajarla. Aunque haya personas más dotadas que otras, sin esfuerzo, la creatividad no surge. En palabras de Pablo Picasso: “La inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando”.
Un artículo de Fast Company recoge la teoría de Keith Simonton que señala que la calidad es una función probabilística de la cantidad. Según estribe: “En los periodos en los que un creativo hace más intentos es cuando aparecen más aciertos y fallos”. Volviendo a Picasso, el artista malagueño destacó: “La calidad de un pintor depende de la cantidad de pasado que lleve consigo”.
Claves para aumentar la creatividad en el trabajo
¿Cómo podemos mejorar nuestra creatividad? Con el foco puesto en aumentar el trabajo, el citado artículo de Fast Company nos da tres claves para elaborar una estrategia que nos permita incrementar nuestro trabajo y orientarlo hacia la creatividad.
Haz algo sin preocuparte por los resultados
No preocuparse por los resultados es la primera enseñanza para alcanzar la creatividad. El reputado físico teórico, ganador del premio Nobel y divulgador Richard Feynman recuerda una clase de arte en la que se le pidió que dibujara sin mirar el papel. Le impresionó el resultado y notó una «fuerza divertida, parecida a la de Picasso«. Como pensaba que no podría dibujar bien sin mirar el papel, no se esforzó mucho en hacerlo. Relajarse y no preocuparse en cómo iba a salir el dibujo contribuyó a un mejor resultado.
Esta estrategia empuja a hacer cosas continuamente, sin altas expectativas. Si quieres escribir, escribe al menos 20 palabras en un cuaderno. Si quieres dibujar, haz un boceto. Si quieres hacer música, tararea una melodía y grábala en el teléfono. Pero no dejes que el tiempo se interponga en tu camino y haz muchas cosas en el menor tiempo posible.
Cumple tus objetivos
Fíjate una frecuencia para completar tu trabajo creativo. Hay gente que publica nuevos trabajos todos los días, pero otros se dan más tiempo. Depende de lo que necesitas para hacerlo más cómodamente.
La necesidad puede empujarte a cumplir. El artículo de Fast Company pone como ejemplo a Mozart. El músico austríaco tenía un propósito práctico para la composición de sus partituras, ya fuera para complacer a sus mecenas o cumplir con un encargo.
Cultiva la creatividad en el mejor momento del día
La disciplina es fundamental para cumplir con la creatividad, pero es necesario estar a gusto. La creatividad depende del entusiasmo personal para ser más efectiva. Dedicar esta parte del trabajo en el momento adecuado ayudará.
También es necesario practicar la habilidad creativa al servicio de lo que realmente te gusta. Es conveniente probar lo que funciona y desechar lo que no.