El teletrabajo ha pasado de ser una opción de flexibilidad que daban las empresas a convertirse casi en una necesidad debido a la pandemia de Covid-19. La generalización del trabajo a distancia ofrece numerosos beneficios, entre ellos el de poder escoger una ciudad mejor para ejercer la actividad laboral, algo también ampliable a autónomos que no tienen que estar necesariamente en contacto físico con sus clientes.
El teletrabajo ahorra tiempo, costes de desplazamiento y facilita la conciliación al trabajador. A la empresa le supone tener empleados más satisfechos y un ahorro en oficinas, entre otras ventajas. Además, supone descongestionar el tráfico de las grandes ciudades y, por tanto, elevar la calidad del aire y contribuir a la lucha contra el cambio climático.
Eso sí, el teletrabajo exige una buena conexión a Internet y, en el caso de los autónomos que pueden trabajar a distancia, contar con la mejor solución de comunicación para que las tareas sean realmente productivas.
La siguiente infografía de Mónica Mena en Statista nos muestra cuáles son las mejores y peores ciudades para vivir y teletrabajar. El ranking toma en consideración diversos factores como el coste de la vida en la ciudad, la calidad de vida y su atractivo, medido por el número de turistas que la visitan.
Mejores ciudades para teletrabajar
- Madrid
- Estambul
- Budapest
- Tirana
- Roma
- Lisboa
- Varsovia
- Moscú
Peores ciudades para teletrabajar
- Mónaco
- Ginebra
- Vaduz
- Antananarivo
- Luxemburgo
- Oslo
- Copenhague
- Ámsterdam