Gracias a la creciente importancia de la movilidad surgen compañías como mediasmart, especializada en publicidad display en los dispositivos móviles. Su fundadora y CEO Noelia Amoedo explica en MasQueNegocio su proyecto, que ofrece a los anunciantes optimizar sus resultados de forma inteligente, comprando medios en tiempo real (Real Time Bidding) y huyendo de la publicidad invasiva.
En el momento en el que empezamos mediasmart, la audiencia ya estaba migrando a los dispositivos móviles, y sin embargo, no existía un modo eficiente para los anunciantes de llegar a esa audiencia: se compraban medios en móvil como se compra en medios masivos, sin tener para nada en cuenta el carácter personal de los dispositivos móviles y sin utilizar verdadera tecnología de optimización. mediasmart nació para cubrir esa necesidad en el mercado y con la inestimable ayuda de grandes expertos del mundo digital, con un gran recorrido también en el sector de las start-ups, como son Michael Kleindl, de Komm Investment, y Aquilino Peña, de Kibo Ventures, que fueron prácticamente cofundadores del proyecto.
La misión de mediasmart es la de hacer posible que los anunciantes puedan llegar a la audiencia móvil a través de campañas publicitarias de forma efectiva. Dentro del ecosistema publicitario podríamos decir que somos lo que se conoce como una plataforma del lado de la demanda (Demand Side Platform), es decir, del lado de los anunciantes. Nos centramos en apoyar a los anunciantes para que consigan los objetivos que buscan con sus campañas publicitarias de la forma más eficiente.
Contamos con una plataforma tecnológica propia, bsmart, que nos permite comprar medios en tiempo real, usando Real Time Bidding, y maximizar los objetivos de los anunciantes gracias a funcionalidades como la segmentación de audiencias, tracking y optimización con respecto a eventos post-click y retargeting.
“Llegamos a donde las empresas centradas en el ordenador no llegan”
Como somos una plataforma centrada en móvil (sólo llegamos a audiencia dentro de aplicaciones móviles o de websites optimizados para verse en dispositivos móviles), llegamos adonde otras empresas centradas en el entorno del ordenador normalmente no llegan. Este es el caso de campañas de publicidad geolocalizadas o campañas que buscan incrementar el uso de aplicaciones móviles, por ejemplo.
Gracias a bsmart podemos dirigir nuestros mensajes publicitarios a personas que se encuentran en un área en la que podemos predecir que tendrán unos intereses específicos. Por ejemplo, un vendedor de material de esquí tendrá buenos resultados anunciándose directamente en la estación, una compañía aérea conectará con su público si difunde sus anuncios en el aeropuerto, etc.
En el caso de las aplicaciones, a diferencia de otros métodos de promoción de aplicaciones, bsmart lo que consigue es conectar con la audiencia a la que le interesa el producto o servicio para el que se ha desarrollado la aplicación y promover su el uso de la misma, no simplemente descargas que luego no generan ningún tipo de interacción por parte del usuario.
“Contamos con nuestra propia plataforma tecnológica, bsmart”
La principal dificultad que encontramos a la hora de desarrollar el mercado fue el hecho de que se necesitaba mucha evangelización, lo cual es habitual en mercados incipientes. Los anunciantes, poco a poco van confiando en la eficacia demostrada de la publicidad móvil, pero aún destinan partidas muy pequeñas de los presupuestos y que están muy lejos de representar el porcentaje que correspondería a ese medio en base a su audiencia. Al añadir a un medio ya de por si nuevo, cosas como Real Time Bidding o compra programática frente al modo tradicional de compra de medios en base a soportes publicitarios, nos encontrábamos al principio con muchas cejas levantadas. Lo bueno es que ahora estas cosas se están viendo ya como una tendencia que está aquí para quedarse y, aunque seguimos necesitando evangelizar mucho, ya no lo hacemos en el desierto, ni mucho menos.
Contamos con nuestra propia plataforma tecnológica, bsmart, que no solo compra en tiempo real sino que maneja “big data” para hacerlo de forma inteligente, lo cual nos permite dar un nivel de servicio muy superior a ciertos competidores que no cuentan con tecnología propia. Además, como hemos sido de los primeros en entrar en el ecosistema móvil RTB, tenemos la mejor cobertura y hemos tenido una muy buena curva de aprendizaje que nos ha permitido evolucionar nuestras herramientas en base a requerimientos de campañas reales. Hemos demostrado con nuestros resultados que nuestros algoritmos de optimización y nuestra capacidad de segmentación funcionan: más del 80% de nuestros ingresos vienen de anunciantes recurrentes.
Este es nuestro gran proyecto y nuestra gran apuesta. Creemos firmemente en el futuro de mediasmart y confiamos en que llegará lejos. De hecho en lo que estamos trabajando ahora mismo es en nuestra proyección internacional. Nuestra plataforma puede dar servicio a cualquier país y está conectada con inventario a nivel global, de ahí que nuestra expansión requiera simplemente conseguir tracción de ventas local en otros países fuera de España.
“Las crisis tienen efectos positivos, como mayor talento disponible para contratar”
Creo que es importante tener cierto espíritu y ánimo para emprender. Hay personas a las que no les motiva marcar su propio camino y, en cierto modo, depender más de sí mismas y menos de las decisiones de un tercero.
Pero, en todo caso, diría que es más una conjunción de factores. En mi caso he trabajado en grandes y pequeñas empresas y ahora tengo un proyecto propio: cada entorno es diferente y lo importante es saber aprovechar las ventajas de un modelo y de otro. Creo que en el caso del emprendedor siempre existe la necesidad de construir, de ver un proyecto crecer, pero a veces eso se puede satisfacer también dentro de otras organizaciones y no la tuya propia.
La financiación es, sin duda, la dificultad que más llama la atención cuando se habla de emprendedores, pero también es verdad que cada vez hay en España más herramientas que ayudan a conseguirla.
Es cierto que la crisis dificulta el desarrollo de cualquier negocio, pero las crisis tienen también efectos colaterales positivos, como la mayor disponibilidad de talento al que puedes contratar, por ejemplo. Lo más importante, desde mi punto de vista, es no tener miedo a fracasar, y eso de por sí es difícil. Es importante ser flexible y saber adaptarse a los cambios del mercado sin obcecarse con una idea original si vemos que no funciona o ha dejado de funcionar. Y si llega el caso de que un proyecto debe cerrarse, siempre se puede aplicar lo aprendido al siguiente, que ya saldrá mejor.
Cada empresa es un mundo y en cada caso, probablemente, debemos apostar por un factor diferencial. Sí creo que debe haber algo en cada proyecto que te haga distinto de la competencia, pero creo que se puede emprender en casi cualquier ámbito. Para mi la innovación implica transformación, y se puede innovar mucho simplemente transformando modelos de negocio o haciendo procesos mucho más efectivos, así que veo estos dos conceptos como dos caras de la misma moneda que la mayoría de las startups de éxito persiguen. Pero además hay muchas startups que nacen en un mercado en particular con productos o servicios que ya existen en otros mercados y a las que les va espectacularmente bien.
Cuando se trata de emprender, la crisis no debería ser ningún impedimento. Pensemos que históricamente, las crisis han sido los escenarios en los que más innovación ha surgido y más ha avanzado la humanidad.
No podemos cambiar el entorno ni las magnitudes macroeconómicas, pero sí podemos hacer nuestro propio camino e intentar sortear los obstáculos.
Para mí es fundamental la constancia, el esfuerzo y la formación en el emprendimiento. Desde luego, que a nadie se le ocurra meterse si no está dispuesto a trabajar muy duro. Recomendaría especialmente a quienes quieran emprender la formación en idiomas porque, en mi experiencia, los mercados son cada vez más globales. En un entorno como el actual es crucial desenvolverse con soltura en el ámbito internacional.
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