El emprendimiento surge donde hay una necesidad. Arancha Roncero, Elena Álvarez y Nuria Jiménez entendieron la importancia de la mediación como alternativa a los procesos judiciales y su necesidad de desarrollarla en España y fundaron el Centro de mediación y resolución de conflictos (CMRC). Arancha nos explica su aventura empresarial en MásQueNegocio.
Mi nombre es Arancha Roncero y soy socia fundadora de un Centro de mediación y resolución de conflictos (CMRC). Somos un equipo de profesionales formado por dos abogados y un psicólogo.
La idea de crear el centro nace al finalizar un master de mediación en la Universidad Complutense de Madrid. Tras muchas horas de formación y práctica, pudimos comprobar la importancia de la mediación y su necesidad de implantación en España.
La mediación es un sistema alternativo a la vía judicial, para resolver los conflictos. Es un medio por el que dos o más personas intentan voluntariamente alcanzar un acuerdo con la intervención de un mediador. El mediador es un profesional especializado, neutral e imparcial que facilita la comunicación entre las partes. Todo lo que se hable en mediación es absolutamente confidencial. Es un proceso regulado por la ley de mediación en asuntos civiles y mercantiles 5/2012 de 6 de julio.
¿Qué ventajas tiene acudir a mediación?
- Es un proceso más económico y rápido que el proceso judicial.
- Los acuerdos tienen un mayor índice de cumplimiento, y si los interesados lo deciden, pueden tener la misma validez que una sentencia judicial (protocolizándolos ante un notario o un juez dependiendo del asunto que se trate).
- Y lo más importante es que los problemas los resuelves tú y no un tercero. En muchas ocasiones cuándo se acude a un proceso judicial, el conflicto no se resuelve ya que se le da la razón a una de las partes, lo que conlleva en muchos casos seguir luchando con el consiguiente coste económico y emocional.
Desde nuestro centro CMRC, nos dedicamos a la aplicación y promoción de la mediación en diferentes ámbitos: familiar, educativa, laboral, vecinal, consumo, sanitario, comunitario e intercultural. También ofrecemos asesoramiento jurídico y psicológico. La idea es que las personas que acudan a nuestro centro se sientan apoyadas en todo momento.
«No encontramos ninguna subvención ni pública ni privada»
En cuanto a las dificultades cuando inicias un negocio, en nuestro caso al principio, fue el encontrar un equipo de trabajo, socias o compañeras con ideas afines y crear cierta empatía de grupo. Una vez alcanzado esto, el siguiente paso fue encontrar ayuda económica y un lugar de trabajo que reuniera las características que necesitábamos. En cuánto a la ayuda económica no encontramos ninguna subvención ni pública ni privada; lo único que había eran pequeñas ayudas para pagar menos impuestos, cómo es el caso de la cuota de autónomos. En nuestro caso tuvimos que iniciar el negocio con ahorros personales o gracias a nuestra familia.
Respecto al lugar de trabajo, visitamos muchos despachos y centros de negocio, hasta que encontramos un centro que favorece al emprendedor dándonos facilidades.
Emprender en esta época no es fácil, pero una de las principales cualidades que debe tener un emprendedor son la fuerza y la constancia. Afrontar de manera positiva todos los retos que te vengan y lo más importante, creer en lo que haces y luchar por ello. Emprender es una forma de progresar profesional y personalmente. Debes ver las oportunidades de crecimiento incluso ante las dificultades.
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