Los sistemas sanitarios dependen cada vez más de su creciente digitalización para prestar servicios eficientes y de calidad, debido, entre otros factores, a la creciente presión de fenómenos tales como el envejecimiento de la población o la necesidad de controlar el gasto público.
El acceso a Internet como fuente de información, las nuevas herramientas de comunicación, y los dispositivos y aplicaciones que permiten a los pacientes controlar y realizar un seguimiento más eficaz de su propia salud, permiten un empoderamiento de los ciudadanos. Sin embargo, paralelamente, el uso generalizado de las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC), y especialmente de los dispositivos móviles, para cuestiones sanitarias genera nuevos retos.
Estos retos, comunes a muchos ámbitos de aplicación de las TIC, incluyen la interoperabilidad de sistemas, aplicaciones y bases de datos, la gestión y el análisis de ingentes cantidades de información, la existencia de posibles brechas digitales y, muy especialmente, la seguridad y la privacidad.
Se estima que el valor del mercado de eHealth en España alcanzó en 2016 los 124 millones de dólares, con un creciente peso de la mHealth o sanidad móvil, según muestra el informe Sociedad del Información en España 2016. Las estimaciones apuntan a que el sector de la sanidad digital alcanzará la cifra de 233.300 millones de dólares en el año 2020, con un crecimiento del 36% en el mHealth durante el periodo 2013-2020 y un protagonismo creciente de la región Asia-Pacífico.
La inversión en TIC del sistema público sanitario en España creció en 2015 un 5,71% respecto a 2014, si englobamos el presupuesto asignado por las Comunidades Autónomas, la inversión TIC realizada por el Ministerio de Sanidad en el Sistema Nacional de Salud –SNS– y la inversión efectuada para el SNS por la entidad pública Red.es, alcanzando los 724 millones de euros. Cabe destacar que, aunque sigue representando una parte muy pequeña del presupuesto TIC total destinado al ámbito sanitario, un 1,34%, el gasto en seguridad ha aumentado un 38% respecto al año anterior.
Más del 60% de los españoles consulta información sobre salud en Internet
El Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información (ONTSI) publicó en abril de 2016 el estudio titulado Los ciudadanos ante la eSanidad. Opiniones y expectativas de los ciudadanos sobre el uso y la aplicación de las TIC en el ámbito sanitario que analiza cómo las TIC influyen en la forma en la que los españoles gestionan su salud. Del estudio se desprende que el motivo más frecuente para utilizar las TIC es informarse. Más del 60% de los españoles consulta información sobre salud en Internet y uno de cada cinco utiliza las redes sociales, aunque el 51% de los españoles no considera Internet una fuente de información fiable en materia de salud.
Los sistemas y herramientas relacionados con la gestión sanitaria, tales como la historia clínica electrónica, el sistema de receta electrónica y la telemedicina, han seguido aumentando su implantación en España, aunque a menor ritmo que en años anteriores. Así, el número de historias clínicas integradas o compartidas entre la atención primaria y especializada del Sistema Nacional de Salud español ha crecido un 5,22% en 2015 respecto al año anterior, pasando de 45,6 millones a 48,7 millones. El servicio de historia clínica electrónica es conocido por, o al menos ha oído hablar de él, el 66,7% de los españoles y el 77,1% opina que es un servicio de gran utilidad.
El servicio de receta electrónica es el servicio de eHealth más conocido por los españoles (88,7%), así como el más valorado, ya que el 83,3% lo considera un servicio muy útil. El número de envases dispensados por receta electrónica en España ha aumentado en 2015 hasta los 724,5 millones, lo que supone el 81,9% sobre el total de los mismos. Actualmente, el 90,82% de los centros de salud cuenta con el sistema de receta electrónica, así como el 89,83% de las oficinas de farmacia de nuestro país.
En cuanto a la telemedicina, en 2015, la especialidad de teledermatología continúa siendo la especialidad más extendida, pues está disponible en doce Comunidades Autónomas. En segundo y tercer lugar se encuentran las especialidades de telerradiología y teleoftalmología. Desde el punto de vista de la demanda, el 84% de los españoles conoce dispositivos o soluciones para el cuidado y control de la salud, aunque solo lo utiliza el 27% y, como es lógico, son los enfermos crónicos quienes más lo hacen.
Respecto a las tendencias tecnológicas que más impacto se prevé que tengan en España en los próximos años es necesario destacar el cloud computing, ya que casi el 74% de las Comunidades Autónomas tiene previsto abordar este tipo de proyectos en el ámbito sanitario a lo largo de 2016.