La Unión Europea actualiza su normativa sobre comercio electrónico en un intento por hacer las transacciones electrónicas “seguras y con validez legal a través de las fronteras” de sus países miembros. El reconocimiento de la firma electrónica en todos los países de la UE es el avance más significativo.
Se trata de la normativa eIDAs que entra en vigor este 1 de junio y pretende consolidar un mercado digital único.
Así, la nueva regulación introduce o regula nuevos servicios para la confianza digital que deberán contribuir a que los europeos usen más el comercio electrónico y, por supuesto, ayudar a las compañías de ecommerce:
- Firma electrónica: sin duda es el aspecto más importante. Una firma electrónica tendrá la misma validez legal que una firma escrita y será válida en los 28 países miembros independientemente de donde haya sido emitida.
- Sellado de fecha y hora: muestra el momento en que el fue emitido un documento electrónico y que no ha cambiado desde entonces.
- Precinto electrónico: equivalente electrónico de un sello o timbre que se aplica sobre un documento para garantizar su origen y autenticidad.
- Certificado electrónico: un servicio electrónico que equivale a la carta certificada convencional.
- Autentificación de sitios web: mediante instrumentos como un certificado que permita a los usuarios verificar la autenticidad de una web y su vínculo con su propietario.
- Admisibilidad legal de los documentos electrónicos para garantizar su autenticidad e integridad.
Esta nueva normativa deroga la anterior ‘Directiva sobre la firma electrónica’, adoptada en 1999.
Cada Estado miembro será responsable establecer y publicar una lista de proveedores de servicios de confianza digital. Así que tanto empresas como ciudadanos “se beneficiarán de los efectos jurídicos asociados a un servicio de confianza cualificado sólo si aparece en (estas) listas de confianza”. Todos estos proveedores pueden utilizar el logotipo de marca de confianza de la UE, que indicará a los usuarios que pueden confiar en dichos servicios para sus transacciones online.
Por último, la UE también está poniendo en funcionamiento el Observatorio eIDAs para que ciudadanos, empresas y administraciones públicas puedan intercambiar opiniones sobre esta nueva regulación, compartir ideas y buenas prácticas.