La tarifa plana para autónomos se introdujo en 2013 para impulsar el emprendimiento y el trabajo por cuenta propia. Esta medida permite reducir la cuota mensual que pagan los autónomos durante dos o tres años.
La tarifa plana ha vivido varios cambios desde su implantación. Con la llegada del nuevo sistema de cotización de autónomos se especuló con que la tarifa plana podría desaparecer. Sin embargo, cuando se implanten las nuevas cuotas, en enero de 2023, la tarifa plana seguirá funcionando. Eso sí, pasará de ser de 60 euros a 80 euros al mes.
¿Qué es la tarifa plana de autónomos?
La tarifa plana para autónomos es una medida de fomento del autoempleo que permite pagar una cuota mensual reducida a la Seguridad Social durante los primeros meses de actividad.
La tarifa plana cubre el pago por contingencias comunes y profesionales, que suponen el 28,3% y el 1,3% de la base de cotización. Las cuotas por cese de actividad y formación profesional estarán exentas mientras dure la tarifa plana.
Tarifa plana en 2023
La cuantía será de 80 euros mensuales durante los 12 primeros meses para las nuevas altas de autónomos a partir del 1 de enero de 2023. Esta cantidad es independiente de los ingresos que el autónomo obtenga.
Si los ingresos netos del trabajador por cuenta propia no superan el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), la cuota seguirá establecida en los 80 euros/mes durante los 12 meses siguientes. Después, el autónomo cotizará por sus ingresos reales según lo establecido en el nuevo sistema.
Este sistema de tarifa plana estará vigente entre 2023 y 2025. A partir del año 2026, el importe se fijará a través de los Presupuestos Generales del Estado de cada año.
Tarifa plana en 2022
Inicialmente, cuando se implementó esta medida en 2013, se pagaban 50 euros. Desde 2019, la cantidad está establecida en los citados 60 euros, si se elegía la base mínima de cotización. Se podría abonar una cuota superior, beneficiándose de un 80% de cotización.
En 2022 todavía seguía vigente la tarifa de 60 euros los doce primeros meses. El segundo año y hasta el mes 18, la cuota de autónomos disfrutaba de una reducción del 50% durante 6 meses, lo que para el trabajador por cuenta propia que pagaba por la base mínima de cotización suponía 146,97 euros al mes.
A partir del mes 19 y hasta el 24, la reducción de la cuota es del 30%, lo que suponía 205 euros mensuales.
Todos los autónomos que se den de alta antes de 2023 se beneficiarán de la “antigua” tarifa plana. Es decir, cotizarán por 60 euros el primer año.
¿Quiénes pueden beneficiarse de la tarifa plana de autónomos?
La tarifa plana sólo es aplicable para los autónomos que comienzan su actividad como trabajadores por cuenta propia. Más concretamente, podrán acogerse a esta reducción de cuota aquellos autónomos que no hayan estado dados de alta en el RETA en los últimos dos años o durante los últimos 3 en el caso de que hubieran solicitado anteriormente esta reducción.
Los autónomos colaboradores y aquellos que estén dados de alta en régimen de pluriactividad no tendrán derecho a esta prestación. Tampoco los autónomos que tengan deudas pendientes con la Seguridad Social.
Los autónomos societarios sí tienen derecho a disfrutar de la tarifa plana, siempre que cumplan los mismos requisitos que los otros autónomos.
Para solicitarla, basta con inscribirse en el RETA y, a través de Import@ss, plataforma para los trámites con la Seguridad Social, indicar en el apartado ‘Alta en trabajo autónomo’ que se trata de un alta inicial.
El programa aplicará la tarifa plana siempre que se cumplan los requisitos.