Las innovaciones tecnológicas no sólo están revolucionando la manera en la que trabajamos, nuestros hábitos de ocio y nuestra forma de vida en general. Un aspecto no muy comentado influye en los modelos de aprendizaje.
Así es. Uno de los beneficios de las innovaciones incluye la mejora de la enseñanza. ¿Qué innovaciones tecnológicas están teniendo un impacto drástico en la educación? The Next Web recoge 7 innovaciones que están cambiando la manera en la que aprendemos.
Impresión 3D
El aprendizaje a través de la práctica o la experiencia está cada vez más de moda. La experiencia es la mejor manera para que los niños desarrollen sus habilidades, en opinión de la mayoría de educadores. Y pocas tecnologías son mejores para fomentar la innovación que la impresión 3D.
Las impresoras 3D ofrecen una gran oportunidad para aprender cuestiones básicas de ingeniería y diseño. Además su facilidad de uso es cada vez mayor, así como su precio más asequible, constituyendo una herramienta útil y sencilla para estimular la imaginación y el aprendizaje.
Gamificación
El uso de los videojuegos para enseñar ha sido un tema polémico, pero está ganando cada vez más adeptos en la educación. Un ejemplo es el Minecraft, que se ha usado para enseñar desde Historia hasta comprensión de lectura.
Al crear un entorno interactivo con reglas, objetivos y competiciones, los juegos digitales favorecen una experiencia de aprendizaje más activa.
Realidad Virtual
La evolución de los videojuegos desemboca en la Realidad Virtual. Con fines educativos ya se ha implantado en muchas escuelas de Europa y Estados Unidos, sobre todo para enseñar asignaturas como Biología y Arquitectura, que favorecen la interactuación.
El lanzamiento de Google Expeditions ha permitido también explorar virtualmente cientos de lugares de todo el mundo. Sus funciones permiten a los profesores presentar información importante en la pantalla y aprender sobre lugares lejanos de una forma jamás vista antes.
Cursos online
En este aspecto destacan los MOOCs (Cursos Masivos Online en Abierto), una tendencia cada vez más alza. Un número cada vez mayor de universidades ofrecen estos MOOC que permiten a millones de estudiantes recibir clases desde cualquier lugar del mundo.
Los MOOCs utilizan vídeos online para impartir conferencias, debates en vivo, cuestionarios y pruebas para ofrecer una experiencia de aprendizaje completa. Algunas universidades han comenzado a proporcionar un modelo híbrido en el que los estudiantes ven conferencias online durante su tiempo libre y suan las horas de clase para proyectos y discusión con sus profesores.
Skype
Skype existe desde 2003 y no es una innovación tecnológica reciente, pero todavía queda mucha innovación educativa que utilizar en las formas creativas con las que la gente usa esta aplicación.
Debido a que Skype facilita la comunicación con personas de todo el mundo, muchas empresas han lanzado servicios de aprendizaje de idiomas que conectan a los estudiantes con un hablante nativo. Las conversaciones en vivo mejoran el aprendizaje de idiomas de forma en la que la enseñanza en el aula nunca podría hacerlo.
Big Data y aprendizaje personalizado
El Big Data es otra tendencia en boga que se está utlizando para comprender y predecir el comportamiento de clientes, rendimiento deportivo, la atención sanitaria y mucho más. Con datos medibles, resulta más fácil que nunca identificar oportunidades de mejora o entregar un mensaje de marketing personalizado. Ahora empieza a tener también un impacto en las aulas.
Los algoritmos y el control de dato permiten hacer un seguimiento de todo tipo de aspectos educativos, como las evaluaciones o la comprensión lectora. El Big Data puede usarse para identificar áreas en un texto donde los estudiantes tiene más dificultades de comprensión, por ejemplo.
iPads y Chromebooks
Los iPads y Chromebooks están fomentando el aprendizaje basado en la investigación. La introducción de estas tecnologías en el aula ha revolucinado la experiencia educativa, ya que, en lugar de gestionarlo todo el profesor, los estudiantes se ponen al cargo de su propia investigación mientras el docente facilita la experiencia.
Al estar al frente de su aprendizaje, los estudiantes adquieren mayor compromiso y responsabilidad y tienen más posibilidades de aprender bien lo que estudian.